Una aventura con auténtico acento inglés.
Como inglés que vive en el extranjero y casado con una mujer eslovena, la tentación de volver a casa late con fuerza. Mi esposa, nacida en Liubliana, adora todo lo inglés, pero la Inglaterra de la que tanto disfruta dista mucho de aquella en la que yo me crié. Ella quiere mudarse allí. Yo quiero seguir viviendo fuera.
Siempre encuentra lugares que yo creía conocer, y hace que me vuelva a enamorar de ellos, así que no todo está perdido. Quizá algún día nos mudemos allí.
En Inglaterra hay mucho que ver y hacer, por lo que el viaje puede extenderse todo lo que se quiera. Una buena autocaravana como la Coral es ideal para dos personas, aunque a los ingleses les encanta llevar la propia, por lo que será bien recibido en la suya. Eso sí, evite las vacaciones escolares de verano, ya que los caminos rurales («carreteras») se abarrotan de gente.
Al llegar a Blighty, nos dirigimos a Cornualles pero, para alardear de nuestra «parte inglesa», hicimos tres paradas especiales por el camino.
Los emblemáticos acantilados de Vera Lynn en Dover son una visita obligada, aunque sólo sea porque puede ayudarle a entender mejor a los ingleses. No hay otro lugar como este en toda la «isla coronada» que represente mejor a Gran Bretaña: aquí el concepto de nación insular queda claro.
«No hay otro lugar como este donde mejor se entienda lo que es ser inglés».
Los ingleses son los mejores construyendo mansiones señoriales. Nosotros, como fans que somos de la serie de televisión Downton Abbey, tuvimos que pasarnos por allí. No decepciona.
¿Hay alguna bebida más inglesa que la ginebra? Permítanos que lo dudemos. ¿Alguna vez se ha preguntado por qué la ginebra se ha vuelto a popularizar tanto o ha querido ver cómo se elabora? Situada cerca de Winchester, reservamos con antelación, nos alojamos cerca, y a uno de nosotros le tocó ser conductor.
Nuestra aventura en Cornualles comenzó aquí. Una encantadora ciudad inglesa, con una preciosa catedral. Ambos podíamos imaginarnos viviendo aquí.
Cornualles está llena de pintorescos pueblecitos pesqueros por los que el tiempo no ha pasado. Este fue nuestro favorito y también lo fue la excelente cena que disfrutamos en el Fountain Inn, uno pub de los auténticos, donde ofrecen un estupendo marisco.
A los ingleses les encantan los jardines. Visite los extraordinarios Lost Gardens of Heligan, dé un paseo por sus bosques y exóticos jardines. Cerca de allí, el Eden Project, con sus gigantescas biosferas, le llevará del Trópico al Mediterráneo.
Quedamos tan prendados de este encantador lugar, que no dudamos en hacer una oferta in situ para una casa. (Aclaración: una casa fija). Mi proyecto de retirarme a las colinas situadas detrás del lago Bled se llegó a desdibujar. Pasee por el puerto y visite la Art Gallery, ya que el alma de Newlyn se nutre de la larga historia de la comunidad de pescadores y artistas.
«Por suerte, no duramos mucho en el desenfrenado mercado inmobiliario que caracteriza a Cornualles y (para mí) esta nueva y sorprendente aventura local ha quedado atrás (por ahora).»
Nos trasladamos a la península de The Lizard para disfrutar de un paisaje impresionante y también a Marazion y St Michael's Mount. Una de las vistas panorámicas más emblemáticas de Cornualles es la abadía de esta isla mareal. Coja un pequeño ferry o, mejor aún, recorra a pie el camino empedrado que atraviesa la bahía.
Puede parar a comprar el souvenir del imán si quiere, pero mejor aproveche el tiempo en otro lugar. La cercana bahía de Whitesand le premiará su llegada al «fin del mundo». Creo que muchos «antimperialistas ingleses» siguen pensando que la civilización acaba de verdad aquí.
El auténtico teatro de los sueños con vistas a la bahía de Porthcurno y al azul celeste del Atlántico: este asombroso anfiteatro en lo alto de un acantilado fue la obra de toda una vida de la lugareña Rowena Cade. En 1930 soñó con construir un teatro natural y al aire libre, una obra que supervisó hasta su muerte, en 1983. Aquí se puede seguir disfrutando del teatro en directo. Un lugar inolvidable, hasta con ese pequeño calabobos (los ingleses y la lluvia...).
Una localidad costera perfecta, con un amplio puerto y cinco playas. Dese un paseo por sus calles adoquinadas, explore las galerías de arte y pruebe el fish and chips local. Figura siempre en la lista de «los mejores lugares para vivir en Inglaterra» (siempre que se disponga de una pequeña fortuna para gastar).
Una localidad moderna, sin mucho encanto, pero con playas para hacer surf. Hay un bonito sendero costero que forma parte de la ruta de valor patrimonial que se encuentra a unos cuantos kilómetros al norte, en Saint Eval, donde se puede disfrutar de unos impresionantes atardeceres.
«Si existe un paraíso gastronómico en Inglaterra, éste bien podría ser Padstow».
Un pueblo cosmopolita situado en un emplazamiento portuario perfecto, donde la principal atracción es la comida. La mayoría de la gente se dirige a los establecimientos del famoso chef Rick Stein, pero nosotros descubrimos Prawn on the Lawn. Una micrococina y una pescadería, donde la calidad de la comida fue muy superior a la del resto de los sitios que probamos durante esta aventura. «La comida perfecta, algo muy poco inglés»
Nuestra aventura en Cornualles duró tres semanas, tuvimos dos días de lluvia y muchos y prolongados días de cielos azules y buenas temperaturas. Magníficos campings, donde sospechosamente siempre había mucho ajetreo, pero que nunca llegaban a estar llenos. De todas las vacaciones que hemos hecho, ésta es la que más hemos apreciado.
La Coral sería el vehículo ideal para un viaje de este tipo, para viajar dos personas cómodamente; si se viaja en familia, entonces la Matrix sería la elección acertada.
