De Alaska a Argentina:
¡Hola! Somos Ron y Chantel, de la cuenta de Instagram «fulltime.vanlife».
Desde noviembre de 2020 viajamos por carretera con una cámper Twin de Adria.
Después de casi un año y medio de recorrer con nuestra primera cámper lugares de toda Europa (desde España y Portugal hasta Noruega, Suecia, Montenegro y Albania), hemos llegado a Guatemala.
¿Cómo es posible?
Pues bien, tras la emisión de un reportaje televisivo de Terra X sobre la Carretera Panamericana (el sistema de carreteras más largo del mundo) y prácticamente sin darnos cuenta, ya habíamos reservado el transporte de nuestra cámper Twin de Adria desde Hamburgo hasta Halifax, en la costa este de Canadá.
Del sueño a la realidad: sobre cómo embarcamos de manera totalmente repentina nuestra cámper a Canadá
Era algo que no teníamos previsto y que al principio nos pareció una idea un poco loca, aunque tampoco es que tuviéramos que hacer muchos preparativos.
Después de habernos informado tanto por Internet como a través de actividades informativas sobre los distintos proveedores de transportes y sus procedimientos, de repente, en abril de 2022, todo se precipitó: Como el barco en el que teníamos reserva llevaba un retraso de tres semanas, de repente tuvimos la oportunidad de trasladar nuestra cámper a un barco que tenía una fecha de salida anterior, con lo que dispusimos exactamente de dos días para preparar el embarque de la cámper y recorrer los últimos 500 kilómetros hasta Hamburgo.
Pasaron tres semanas desde que la dejamos en el puerto hasta que pudimos recibir nuestra Twin en Canadá. Nosotros estábamos encantados y, por suerte, recibimos la cámper completamente intacta.
Momentos inolvidables:
Lo más destacado de nuestro viaje por Canadá, EE.UU., México, Belice y Guatemala
En los más de 50 000 kilómetros recorridos desde entonces, como es obvio, hemos visto y experimentado muchas cosas.
En primer lugar, recorrimos la carretera Transcanadiense de este a oeste a través de Canadá y hasta Alaska. Desde allí bajamos por la costa oeste hasta EE.UU., una vez cruzamos México nos adentramos en el Caribe hasta Belice y finalmente llegamos a Guatemala, en Centroamérica.
Nos gustaría relatar brevemente nuestros momentos más destacados en cada uno de los cinco países americanos por los que hemos viajado hasta ahora.
Encuentros con animales salvajes y paisajes impresionantes:
Nuestro viaje por carretera a través de Norteamérica
Para el comienzo de nuestro viaje por el continente americano, no nos imaginábamos mejor país que Canadá.
La amabilidad, el carácter abierto y la cordialidad de la gente son sencillamente insuperables. También pudimos contemplar paisajes como las cataratas del Niágara, la metrópolis de Toronto, pequeñas ciudades más allá del Círculo Polar Ártico y los populares parques nacionales de Banff y Jasper, en las Montañas Rocosas.
Aquí también tuvo lugar uno de nuestros momentos favoritos del viaje, cuando una madre oso pardo salió de repente de entre los arbustos con dos oseznos y cruzó la carretera a pocos metros delante de nuestra camper.
En Estados Unidos nos esperaban tantos momentos destacados que nos resultó muy difícil elegir uno.
Por ejemplo, el festival de Cheyenne, del que supimos por casualidad, ya que habíamos aparcado cerca, y en el que actuó el artista Tones and I.
Sin embargo, lo que más nos impresionó fue la gran cantidad de paisajes y parques nacionales del oeste de EE.UU. y entre ellos, en particular, Yellowstone, con su naturaleza tan singular y diversa.
Alberga más de la mitad de los géiseres del mundo, innumerables fuentes termales como el colorido Gran Fuente Prismática y el pintoresco Gran Cañón de Yellowstone.
México nos recibió con sus enormes cactus, unas impresionantes experiencias con animales (como bucear entre tiburones ballena o la liberación de crías de tortuga recién nacidas), las fotogénicas formaciones rocosas de las Grutas Tolantongo, los numerosos cenotes y la variedad de ruinas mayas.
Sin embargo, nuestro primer paseo en globo aerostático sobre la antigua ciudad de Teotihuacán al amanecer nos marcó de forma especial.
En su momento, con 200 000 habitantes, no sólo fue la ciudad más poblada del continente americano, sino también una de las más grandes del mundo.
Puro sentimiento caribeño:
Los inesperados descubrimientos de nuestro viaje por Belice y Guatemala
Aunque ya estábamos oficialmente en el Caribe, en la península de Yucatán, no llegamos a sentir realmente este ambiente único hasta llegar a Belice, el único país anglófono de Centroamérica.
En lugar de dirigirnos a la turística isla de vacaciones de Caye Caulker y al Gran Agujero Azul (el segundo arrecife de coral más grande del mundo), decidimos conducir por la carretera costera a través de la exuberante selva verde hasta Placencia.
Situado en la punta de una península, el pueblo ofrece sobre todo una cosa: auténtica vida playera y un relajado ambiente reggae.
Justo al otro lado de la frontera con Guatemala se encuentra otro punto destacado de nuestro viaje: Tikal, Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, que no sólo impresiona por su arquitectura, literalmente excepcional, sino también por su ubicación en medio de la selva tropical.
Por la mañana sobre todo, cuando una densa niebla envuelve las ruinas de la que fuera una importante ciudad maya y la sumerge en una atmósfera mística, destacan aún más los sonidos de los numerosos pájaros y otros animales que viven en la selva.
También nos gustó la pequeña isla de Flores en el lago Petén-Itzá y la reserva natural de Semuc Champey.
Tras la Panamericana, la vuelta al mundo:
nuestros planes para el futuro
En los próximos dos meses continuaremos nuestro viaje por Centroamérica hacia El Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica, hasta llegar a Panamá. Aquí tenemos que devolver nuestra Twin de Adria a un barco para circunnavegar la única ruptura de la Panamericana (el Tapón del Darién) y llegar a Sudamérica. Allí queremos viajar mucho y conocer tantos países como sea posible.
Además de cruzar el ecuador, nos hace especial ilusión el mundo montañoso de los Andes y el más meridional de los paisajes, el de Tierra del Fuego, en la Patagonia. También hemos planeado un desvío a la Antártida. Después de todo ello, nos gustaría seguir dando la vuelta al mundo en nuestra camper Twin de Adria, posiblemente en otro continente como África, Asia o Australia.
En cualquier caso, ¡estamos encantados con lo que nos depara el futuro!
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